Día 3. Viento en popa.
Pues sí que se disfruta la soledad a veces sí.
Llevo dos días con una especie de energía positiva imparable, muy contenta (hacía mucho tiempo), tanto que hasta me pongo a cantar en las escaleras del metro ¡ja, ja, ja! Esta mañana una mujer se llevó un susto serio ¡pobre!
Además hoy fue un buen día: Poco teléfono en el curro (¿Se nota que es lo que menos me gusta?), alguna bromita curiosa, paseo con el novio, cenita y a casa que mañana madrugo.
Sí, sí, sí. Un buen día.
Mañana como con la familia (es una sensación un tanto extraña: no llevo una semana sola, y ya me siento como invitada en mi casa)y por la tarde volveré aquí, a seguir descansando y estudiando un poco el sábado. Y si no vengo mañana, pues el sábado, que tampoco es mal día.
Hoy soy breve ¡se me están cerrando los ojos!
Un saludico a todos.
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